Reductores para tratamiento de metales

Potente acción reductora: estos reductores poseen una acción reductora potente, facilitando la transformación de compuestos metálicos, como óxidos, a sus estados metálicos originales. 

Compatibilidad versátil: son formulados para ser compatibles con una amplia variedad de metales, permitiendo su aplicación en diversos procesos de tratamiento sin sacrificar eficacia. 

Control de reacciones químicas: contribuyen al control efectivo de reacciones químicas durante el tratamiento, evitando la formación de compuestos no deseados. 

Facilidad de enjuague: permiten un enjuague fácil y completo, asegurando que no queden residuos que puedan afectar la eficacia de los tratamientos posteriores. 

Eficiencia en la remoción de contaminantes: exhiben eficiencia en la eliminación de contaminantes superficiales, preparando el metal para tratamientos adicionales. 

Rapidez en la acción: actúan de manera rápida y eficiente, lo que es fundamental en procesos de producción que requieren tiempos de tratamiento optimizados. 

Efectividad en tratamientos específicos: son efectivos en tratamientos específicos, como la remoción de películas orgánicas, pinturas antiguas o capas protectoras gastadas. 

Desoxidación de metales: en procesos de desoxidación para eliminar capas de óxido y devolver el brillo a superficies metálicas. 

Preparación para galvanización: antes de procesos de galvanización, para garantizar la adhesión óptima del recubrimiento de zinc. 

Eliminación de pinturas antiguas: en la eliminación de pinturas antiguas o recubrimientos para preparar el metal para nuevos tratamientos. 

Limpieza de equipos industriales: en la limpieza de equipos industriales y maquinaria metálica afectados por contaminantes y óxidos. 

Tratamientos de conversión: en procesos de conversión de metales para mejorar propiedades físicas y químicas. 

Restauración del brillo original: contribuyen a devolver el brillo original a las superficies metálicas al eliminar capas de óxido y contaminantes. 

Optimización de procesos de galvanización: mejoran la eficacia de los procesos de galvanización al garantizar una superficie de metal limpia y receptiva. 

Preparación efectiva para nuevos recubrimientos: facilitan la preparación efectiva del metal para nuevos recubrimientos, mejorando la adherencia y durabilidad. 

Reducción de residuos y contaminantes: ayudan a reducir residuos y contaminantes en la superficie del metal, optimizando tratamientos posteriores. 

Eficiencia en tratamientos específicos: ofrecen eficiencia en tratamientos específicos, adaptándose a necesidades particulares de limpieza y preparación.